EL “THEMA MUNDI” O LA GENITURA DEL MUNDO Y SU APLICACIÓN EN ASTROLOGÍA

Un tema interesante dentro de la astrología clásica estudiado en la antigüedad pero que desafortunadamente hoy no tiene gran repercusión, sino entre los astrólogos clásicos, no exento de debate y que convendría acotar y en cierto modo que podría dar para trabajos ciertamente relevantes y una buena línea de estudio e investigación para conocer más en profundidad cómo se vincula la ciencia de la naturaleza y el cosmos a la astrología, es el Tema del mundo (Thema Mundi) o la Genitura del mundo.

Veremos en los siguientes párrafos cómo el desarrollo teórico de la astrología además tiene su aplicación práctica sobre eventos terrestres como el clima, la meteorología o los cambios terrestres y climáticos.

Antes de entrar en profundidad en la materia debemos advertir que en no pocas ocasiones ha habido cierta controversia porque se ha querido ver en muchos casos el nacimiento del mundo según el “Thema Mundi” cuando en realidad hasta los autores clásicos ya explican claramente que se trata de un tema especulativo, aunque no carente de sentido y aplicación.  La presentación del “Thema Mundi” en realidad tiene mucho más que ver con un modelo de eventos asociados al sistema astrológico vinculado al movimiento y sucesos en el mundo, que a un momento prehistórico de nacimiento del mundo. Más bien creemos que debería tratarse como un modelo-patrón que se vincula a eventos terrestres según determinadas posiciones planetarias y zodiacales. Más bien como un patrón de comportamiento terrestre.

Uno de los grandes autores clásicos que en la antigüedad que desarrolló la explicación del “Thema Mundi” fue Firmico Materno. Para comprender su desarrollo reproduciremos el texto con su explicación en el Libro III de la Mathesis de Firmico:

Oh LOLLIANO, gloria y ornamento de nuestra patria, es necesario saber, en primer lugar, que Dios, que es el artífice del hombre, produjo su forma, su condición y toda su esencia, a imagen y semejanza del mundo, la naturaleza señalando el camino. Porque él compuso el cuerpo del hombre, así como el del mundo, de la mezcla de los cuatro elementos, a saber, el fuego, el agua, el aire y la tierra, para que la conjunción de todos estos, cuando se mezclaron en la debida proporción, pudiera adornar a un animal en la forma de una imitación divina. Y así el Demiurgo exhibió al hombre mediante el artificio de una fabricación divina, de tal manera que en un cuerpo pequeño pudiera otorgar el poder y la esencia de todos los elementos de la naturaleza, para este propósito, reuniéndolos juntos; y también, para que desde el espíritu divino, que descendía de un intelecto celestial, hasta el sostén del cuerpo mortal, preparara una morada para el hombre, la cual, si bien era frágil, podía ser similar al mundo. Por eso, las cinco estrellas (planetas) y también el sol y la luna, sostienen al hombre con una agitación ardiente y eterna, como si fuera un mundo menor, para que el animal que fue hecho a imitación del mundo pueda ser gobernado por una esencia igualmente divina. De ahí aquellos hombres divinos, Petosiris y Necepso[1], que merecen toda la admiración posible, y cuya sabiduría se acercó a la misma esencia de la Deidad, para que nos entregaran científicamente la genitura del mundo, a fin de que pudieran demostrar y mostrar que el hombre fue formado conforme a la naturaleza y semejanza del mundo, y que está bajo el dominio de los mismos principios por los cuales el mundo mismo es gobernado y contenido, y que es perennemente apoyada por los compañeros de la perpetuidad. "Según Esculapio, por lo tanto, y Anubio, a quien sobre todo la divinidad Mercurio confió los secretos de la ciencia astrológica, la genitura del mundo es la siguiente: El constituyó el Sol en la 15ª parte (grado) de Leo, la Luna en la 15ª parte de Cáncer, Saturno en la 15ª parte de Capricornio, Júpiter en la 15ª parte de Sagitario, Marte en la 15ª parte de Escorpio, Venus en la 15ª parte de Libra, Mercurio en la 15ª parte de Virgo, y el Horóscopo en la parte 15 de Cáncer. Conforme a esta genitura y estas condiciones de las estrellas, y a los testimonios que aducen en la confirmación de esta genitura, son de la opinión que los destinos de los hombres, también, se disponen de acuerdo con arreglo a lo anterior, como se puede aprender de ese libro de Esculapio que se llama Myriogenesis, (es decir, Diez mil, o una multitud innumerable de Genituras,) para que nada en las varias genituras de los hombres pueda ser encontrado discordante con la mencionada genitura del mundo. Podemos ver, por lo tanto, hasta qué punto o de qué manera una estrella acomoda el testimonio de su radiación a las luminarias (aspecto, rayo). Las luminarias son el Sol y la Luna. Pero Saturno primero se une con la Luna : porque sigue la condición de la Luna. Lo hace, sin embargo, porque, al estar constituido en un signo femenino, recibe diametralmente (por oposición) los rayos de la Luna, que también se constituye en un signo femenino. Pero cuando el mismo Saturno, en esa genitura, hace una transición a Acuario, se une de nuevo al Sol por una radiación similar, y es de nuevo dispuesto en las mismas condiciones que el Sol. Por estar constituido (situado) en un signo masculino, se asocia a un testimonio igual de ya que mira diametralmente hacia el Sol (oposición), con una radiación similar a aquella con la que mira a la Luna. Después de esta manera también Júpiter se constituye en Sagitario, y a través de un trígono que da testimonio al Sol, se une primero a este mismo, y por ello se constituye en un signo masculino, y al asociarse con el Sol, que se constituye en un signo de la misma clase, sigue primero el poder de ello; pero cuando realiza una transición a Piscis, se une otra vez en una condición similar a la Luna. Porque, de manera similar, posicionado a través de un trígono en un signo femenino, mira hacia la Luna, que se constituye en un signo de su misma clase, con igual radiación. "De igual manera también el planeta Marte, estando constituido en Escorpio, porque está en un signo femenino, a través de un trígono, ofrece un testimonio de la Luna; pero cuando viene a Aries, ofrece un testimonio del Sol, y haciendo una transición, estando colocado en un signo masculino, se une por una radiación de trígono con el Sol. Este modo, sin embargo, es cambiante; pues Marte estando en Libra, que es un signo masculino, sin embargo da un testimonio a la Luna a través de un aspecto cuadrado pero cuando realiza una transición a Tauro, estando en un signo femenino, y mirando hacia el Sol por una radiación cuadrada, otra vez da un testimonio de ello. Estos hombres [divinos], sin embargo, opinaban que el planeta Mercurio es común en la genética antes mencionada, y que esta estrella no da testimonio ni al Sol ni a la Luna por un cuadrado, o un trígono, o una oposición; ni se une por radiación ni con el Sol ni con la Luna. Pero si Mercurio es una estrella de la mañana, se deleita de día con el Sol, pero si es una estrella de la tarde, de noche con la Luna. Por todo lo que hemos dicho aquí, estos hombres eran de la opinión de que debe ser observado en las genituras de los hombres, y pensaron que no podían descubrir el destino del hombre, excepto que esas radiaciones fueran recogidas por una sagaz investigación. Sin embargo, para que la disposición de estos hombres no engañe y no sea que alguien piense que esta genitura del mundo fue inventada por estos sabios, sin causa alguna, es necesario que expliquemos todas las cosas en particular, a fin de que la gran sagacidad mostrada en esta disposición, pueda, por las exposiciones más diligentes, ser insinuada a todos los hombres. "El mundo no tuvo un cierto día de su origen, ni hubo un tiempo en el que el mundo se formó por el consejo de un intelecto divino, y la Deidad providencial; ni tampoco el ansioso deseo del ser humano de haber sido capaz de extenderse hasta el punto de concebir o esclarecer el origen del mundo, especialmente desde la mayor apocatástasis que se efectúa antes de una conflagración (incendio) o un diluvio, se compone de 300.000 años. Porque la apocatástasis mundana está acostumbrada a ser por estos dos eventos; ya que un diluvio sigue a una conflagración, porque las sustancias que son quemadas no pueden ser renovadas y restauradas a su apariencia prístina y forma, por las mezclas y el polvo de hormigón de las cenizas, que son una colección de semillas generativas convirtiéndose en prolíficas. Los hombres divinos, por lo tanto, siguiendo el ejemplo de los matemáticos en las genituras de los hombres idearon esto, como si fuera la genitura del mundo. Por lo tanto, considero conveniente explicar el artificio de esa composición divina, a fin de que la admirable razón del esquema conjetural pueda ser desplegada de acuerdo a las reglas del arte."Estos hombres divinos, por lo tanto, así deseaban constituir la Luna [en la genitura del mundo], para que pudiera unirse con Saturno, y pudiera entregar el dominio de las revoluciones periódicas. Tampoco fue concebido de manera inadecuada. Porque el primer origen del mundo [es decir, el comienzo del primer período mundano] era inculto y grosero, y salvaje a través de la asociación rústica, y también porque los hombres bárbaros, habiendo entrado en los primeros vestigios de luz, y que eran desconocidos para ellos, eran desposeídos de razón, a consecuencia de haber abandonado a la humanidad, estos hombres divinos opinaban que este tiempo rústico y bárbaro era saturniano, que, a imitación de esta estrella, el comienzo de la vida podría caracterizarse por una ferocidad bárbara e inhumana. Después de Saturno, Júpiter recibió poder periódico. Porque a este planeta la Luna se unió en segundo lugar, para que la prístina y escuálida rusticidad fuera abandonada, y la ferocidad de la ruda asociación que es la vida humana pu diera ser cultivada a través de la purificación de los modales. En tercer lugar, la Luna uniéndose con Marte, le entregó el de la revolución periódica; de modo que la mortalidad, habiendo entrado en el camino correcto de la vida, y la inhumanidad sometida a una cierta moderación, todos los ornamentos de las artes y las fabricaciones podrían originarse de esta conjunción. Después de Marte, Venus recibió el poder predominante, a fin de que las disciplinas humanas, en aumento gradual, la prudencia y la sabiduría pudieran adornar a la humanidad. De ahí su opinión de que esta vez, en la que los modales de los hombres se cultivaban mediante el aprendizaje, y naturalmente formado a la rectitud por las diversas disciplinas, estaba bajo el dominio de Venus; por lo que al ser protegido por la majestad de esta alegre y divinidad saludable, podrían gobernar sus acciones erróneas por el poder gobernante de la Providencia. Pero [estos hombres divinos] concibieron el último período para estar bajo el dominio de Mercurio, a quien la Luna se une en último lugar. ¿Qué se puede encontrar más sutil que este arreglo? Para que la humanidad sea purificada de las persecuciones groseras y salvajes, las artes también inventadas, y las disciplinas dispuesto de una manera ordenada, la raza humana agudizó su poder inventivo.Y porque el noble genio en el hombre no podía preservar (uniformemente) un curso en la vida, la improbabilidad del mal aumentaba desde varias instituciones y prevalecían los modales confusos y los crímenes de una vida de maldad: de ahí que la raza humana en este período inventara y entregara a otros maquinaciones más enormes.Por esta razón, estos sabios pensaron que este último período debería ser asignado a Mercurio, para que, a imitación de esa estrella, la raza humana pueda dar a luz inventos repletos de maldad. "Para que nada, sin embargo, pueda ser omitido por nosotros requisito para la aclaración de este tema, todas las cosas deben ser explicadas, que probar que el hombre fue formado en la imitación y similitud del mundo. Y que la apocatástasis mundana se efectúa a través de una conflagración y un diluvio, también hemos afirmado, y es confirmado por todos los hombres. La sustancia también del cuerpo humano, el curso de la vida, una vez que ha sido completado, se disuelve de la misma manera. Porque tantas veces como por el ardor natural del calor el cuerpo humano se relaja demasiado, se evapora como consecuencia de la inundación de los humores; y así siempre sufre una decocción por un ardor fiero, o se disuelve por una desudación excesiva. Tampoco afirman los más sabios intérpretes del arte médico que la sustancia de la raza humana se disuelve por una terminación natural de cualquier otra manera, que por la humedad que disuelve el fuego, o de nuevo el calor que predomina, el fuego que se extingue por dentro y profundamente, se deja sin humedad. Así, el artífice, la Naturaleza, constituyó al hombre en una imitación muy diversa del mundo, de modo que todo lo que disuelve, o forma la esencia del mundo, debe ser también la causa de la formación y disolución del hombre".

 

Llama la atención el pasaje de Firmico Materno cuando afirma que no es posible conocer la genitura o nacimiento del mundo pero que se acepta la genitura ampliamente. Por tanto, el horóscopo resultante no debería conjeturarse como tal sino ser considerado como un modelo a seguir o patrón en el que las fuerzas planetarias se emplazan en la zona más terrenal y material pugnando por salir a la luz.

La cuestión esencial que se deriva es de tipo natural que deberá analizarse desde el punto de vista filosófico-astrológico clásico, pues que el Horóscopo (ascendente) se sitúe en el signo de Cáncer no es casual y debe convertir pues el signo en el que se emplaza éste en una zona sensible a fenómenos que afectan de alguna manera especialmente a la Tierra (climáticos y meteorológicos, geológicos y terrestres), con la acción y vinculación especial necesaria de la Luna[2].

Es necesario también mencionar que en estos tiempos tan próximos al final de un ciclo de triplicidad de tierra (240 años) dentro del milenio astrológico, se destapa en el ibro III de la Mathesis de Firmico Materno y que siempre suele llamar la atención de astrólogos y profanos, los ciclos astrológicos de largo período [3].

 

 

APLICACIÓN DEL THEMA MUNDI EN LA ASTROLOGÍA

 

Tal y como se puede observar en la aplicación del tema del mundo de Firmico Materno podemos sospechar que la parte más sensible del horóscopo corresponde al ascendente en el que se ubica la Luna (ultima esfera que los seres deben atravesar para llegar al mundo sublunar) y en oposición a Saturno (primera de las esferas por las que los cuerpos deben descender para llegar al mundo). Esto es esencial en la astrología porque de la observación los autores clásicos descubrieron que el eje Cáncer-Capricornio tiene una trascendencia especial. De hecho el clima global (con mayor importancia en Occidente) está regulado por los vientos Alisios que se extienden y regulan los períodos de humedad – sequedad / calor – frio en torno a 2 zonas situadas en posición Norte-Sur del Ecuador (desde los 30º o 35º de latitud hasta el Ecuador) y que llamaron Trópicos de Cáncer y Capricornio por encima y debajo de los cuales hasta los círculos polares se encuentran las zonas templadas.

Para comprobar que la influencia del eje Cancer-Capricornio tiene una gran importancia en torno a lo afirmado por Firmico Materno en la Mathesis podemos aplicarlo sobre un evento que por su propia naturaleza ya tiene una importancia capital: el ciclo luni-solar y los eclipses. Para ello tendremos en cuenta cómo la sensibilidad de la presencia de planetas y rayos en el signo de Cáncer (Ascendente del Thema Mundi) en el ciclo luni-solar genera cambios en la Tierra, tanto meteorológicos o climáticos como geológicos. Se suelen producir transformaciones terrestres de importancia (tanto más importante serán los eventos si estos están relacionado además con ciclos mundiales mayores). De manera que si nos fijamos en la lunación anterior al mes de julio de 2019 observamos lo siguiente:

Se puede apreciar cómo la luna llena (ciclo luni-solar oposicional) se sitúa en el eje Cáncer / Capricornio. Saturno en su propio signo (tierra) aplica por oposición a la Luna, aplicando también luz viene a suponer un efecto generalizado de mayor profundidad, así nos encontramos que en estas fechas se sucedieron los siguientes eventos significativos:

  • Varios terremotos en el desierto de Mojave en California (días, 4, 5 y 6 de julio)
  • Fuerte explosión y erupción violenta del volcán Stromboli (3 de julio)
  • Terremotos en Indonesia (Ternate, 7 de julio)
  • Terremoto en Japón (Nago, 13 de julio)
  • Terremoto en Australia (Broome, 14 de julio)
  • Seismo en Indonesia (Laiwui, 14 de julio)
  • Seismo en Australia (fuerte réplica en Bromme, 15 de julio)
  • Terremoto en Papúa Nueva Guinea (Kandrian, 15 de julio)

Por último, añadir que esta lunación al coincidir con una apertura de puertas (Sol-Saturno en la lunación) provocó episodios de fuertes tormentas y lluvias acompañados de granizo (Saturno), como por ejemplo la declaración de zona catastrófica en la localidad Navarra de Tafalla (España). Episodios producidos los días 8 y 9 de julio.

BIBLIOGRAFÍA DE REFERENCIA:

  • Historia comparada de las religiones (Dr. Eduardo Alfonso)
  • Libro Conplido en los Iudizios de las Estrellas (Alí Ben Ragel, Ed. Gracentro, Libro 8º)(Ed. Gracentro)
  • El cielo de Sefarad: Los judíos y los astros (Siglos XII y XIV). Josefina Rodríguez Arribas
  • La teoría delle congiunzioni Giove-Saturno tra Tardo Antico e Alto Medioevo (Stefano Buscherini)
  • Sol, Tierra, Hombre (Theodor Landscheidt)
  • Summa Astrológica (Antonio De Najera)
  • Tetrabiblos (Ptolomeo)
  • Textos astrológicos medievales (Messahallah – Ben Ezra)(Demetio Santos)
  • Mathesis (Libro III) (Firmico Materno)
  • Liber Astronomiae (Guido Bonatti)(Bonatti on Mundane Astrology, Benjamin Dykes)
  • Libro de los juicios de las estrellas (Abrahamm Ibn Ezra)
  • Imago Mundi (Pierre D´Aillly)
  • Mundi Thema or The Geniture of the World (Thomas Tailor, Universidad de California)
  • Diccionnaire Des philosophes Antiques (Richard Goulet)

 

[1] Según Thomas Taylor Petosiris y Necepso fueron dos de los escritores más antiguos de la astrología egipcia (hermética), que, en muchos aspectos, difiere de la de los caldeos. Aunque varios autores creen que fue un autor greco-egipcio (más que autores), bajo un nombre ficticio (legendario), de un famoso libro de texto de astrología, probablemente producido durante el siglo II a.C., pero basado en una tradición más antigua. Este manual, del que sólo se conservan fragmentos dispersos, representa uno de los testimonios más antiguos de la tradición hermética.

[2] La Luna tuvo una especial relevancia en las sociedades y civilizaciones antiguas (hindú, caldea, árabe, egipcia, etc) y en muchos casos a través de los ciclos luni-solares

[3] A modo de ejemplo la cultura hindú cuenta en sus observaciones que doce mil años divinos, compuestos cada uno de trescientos sesenta de estos días que constituyen el período de yugas o edades, cada una de las cuales de divide de la siguiente manera: la edad de Krita (krita – yuga) de 4000 años divinos, la edad de tetra de 3000, la edad dwapara de 2000 y la edad de kali (kali – yuga) de 1000. Estas vendrían a corresponder a 3.200.000 años mortales o terrestres, 2.400.000 años mortales, 1.600.000 años mortales y 400.000 años mortales respectivamente para cada edad mencionada. Las 4 edades: krita, treta, dwapara y kali, constituyen reunidas, una gran Edad o época (yuga). Mil grandes edades hacen un dia Brahma.

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Comentario por Templario el diciembre 25, 2019 a las 8:34pm

Es muy interesante, se necesitan trabajos de este nivel en el colectivo gracias Roberto.

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