OTROS SECRETOS ASTROLÓGICOS DEL VATICANO

[Adela Ferrer]

Paulo III con sus sobrinos.

 

En 1543 el Papa Paulo III (elegido en 1534) ordenó a su astrólogo de confianza, Lucas Gaurico, elegir el día y la hora más propicios para colocar una primera piedra y re-fundar así la Basílica de san Pedro, el templo más importante de la cristiandad.

 

Ceremonia de colocación de una primera piedra fundacional en 1927

 

En su “Tratado Astrológico” Gaurico escribió: A la hora en la que había de ser depositada la piedra fundacional, Vicencio Campanatius, que estaba comprobando el momento idóneo con el astrolabio, dió una fuerte voz y en ese instante, Annio Verulano, tocado con su tiara de cardenal, colocó en los cimientos la lápida de mármol junto a unas monedas de oro y plata acuñadas con el escudo del pontificado de Pablo III.

Monedas de Paulo III

 

Esta fue la elección de Luca Gaurico.

 

 

Pero antes de comentar esta carta eleccional, conviene indagar en los motivos que llevaron a Paulo III a comenzar de nuevo unas obras que llevaban mucho tiempo en marcha: exactamente 37 años antes, el 18 de abril de 1506, Julio II, de reconocidas aficiones astrológicas, había escogido a su vez día y hora para comenzar la construcción de la Basílica a cargo de su arquitecto Bramante.

 

En aquella ocasión, a Julio II se le ocurrió pedir a sus astrólogos que calcularan el día y la hora más favorable para colocar la primera piedra, coordinándola a su vez con otras tres cartas muy importantes: ¡La del nacimiento de Cristo, el horóscopo del mundo y la suya propia!

 

 carta natal atribuída a Cristo

 

Aunque no parece que la enrevesada elección de Julio II fuese muy acertada

Carta eleccional de refundación de san Pedro de Julio II

 

Porque transcurridos 37 años, 2 nuevos arquitectos y 4 Papas más tarde,

Los 4 proyectos de la Basílica

 

las obras no dejaban de retrasarse, en 1527 sufrieron el saqueo de las tropas Carlos V y ocasionaban notables problemas, de los cuales los económicos no eran los menores.

Esta fue la elección de Julio II en 1506

 A la vista de ella, Lucas Gaurico escribió en su Tratado el siguiente comentario crítico:

Las dos infortunas junto al Nodo Sur en la Casa II, advertían que los gastos serían intolerables; aunque, por direcciones primarias, en 1508 los rayos de Júpiter estuvieron en trígono al Sol.

 

Escogiendo, para corregir pasados errores, esta nueva fecha:

 

Además de haber situado a Venus en el MC, máxima dispositora de toda la carta, veamos las normas tradicionales en las que se basó Luca Gaurico para hacer esta elección de re-inicio de construcción o carta de “borrón y cuenta nueva”.

 

Abraham ben Ezra  Las elecciones de Casa IV.

La construcción de edificios.

La Casa IV es significadora de la construcción de edificios, por tanto, intenta que la Luna esté allí (se cumple) en Tauro, en Leo o en Acuario (no se cumple).

Si no puedes lograrlo, procura que se halle en los primeros 15 grados de Virgo. Si esto tampoco es factible, trata de que se encuentre en los primeros 15 grados de Géminis.(no se cumple)

Es preferible que Saturno esté en la casa IV, en aspecto con  la Luna o en aspecto con con el signo del Ascendente, (se cumple) pero procura que Marte no se encuentre en posición angular ni formando aspecto con Saturno (se cumple).

Y si puedes lograr que el regente del Ascendente esté presente en la Casa X, (se cumple) o que la Luna dé su fuerza a algún planeta ubicado en la Casa X (se cumple), es lo mejor que puede suceder.

 

 

En cuanto a las circunstancias que hay que evitar con respecto a la Luna de la elección y que ya vimos:

 

La primera es cuando está eclipsada.

 - La segunda es cuando está bajo los rayos del Sol y hay entre ellos menos de 12 grados.

- La tercera es cuando está a menos de 12 grados de la oposición del Sol.

- La cuarta es cuando se une a un planeta malo y lo aspecta.

- La quinta es cuando está en la fuerza del doce de Saturno o de Marte.

- La sexta es cuando se acerca a la parte meridional.

- La séptima cuando está con La Cabeza o la Cola a menos de 12 grados.

- La octava es cuando está en la vía combusta.

- La novena cuando se halla al final de un signo, cualquiera que éste sea.

- La décima cuando va lenta de curso.

- La undécima cuando está en la IX, que es la contraria a su gozo."

 

Se respetan todas ellas y además, reúne algunas buenas condiciones, como la de halalrse junto a Júpiter, la fortuna mayor y la de ir rapidísima.

 

Añadamos aquí que, para mayor gloria de Venus y de la armonía arquitectónica, en 1546, Miguel Ángel con 72 años de edad, aceptó ser el arquitecto jefe de la Basílica san Pedro y, aunque murió antes de verla terminada,

 

su proyecto fue el que finalmente prevaleció y hoy podemos admirar la magnífica cúpula que creó y que constituye el elemento central que ordena y configura todo el espacio de san Pedro.  

 

[Galefod]

Enseñanza por medio de la historia. Pedagogía con la práctica explicada y la crítica que cualquiera puede realizar.  Un disfrute. Gracias.

[Pedro Jiménez Sanmillán]

Enhorabuena Adela. Me ha encantado leerlo.

Un saludo

[Isabel Mejia]

Buena informacion Adela, como todo lo que nos comunicas.

En lo que si no fallaron las intenciones del Sumo Pontifice y sus astrologos de la epoca, fue en establecer esa(s) decision(es) con el Sol en Tauro.  Vaya lujo y comodidades que se han dado.

                                                          

                                                                        

[Gloria Laura]

Que grato leer artículos de Astrología plasmados en la historia y como influía en la gente con mayor conocimiento de esa época. Esas personas que no ignoraban la influencia de Dios plasmada en el Universo. Felicitaciones por tus investigaciones y gracias por compartirlas con tus compañeros estudiantes eternos de esta Ciencia matemática y exacta. Saludos. Laura

[Fernando]

Gracias Adela